Mis planes no son los suyos
Reflexiones sobre las lecturas del XXV domingo del tiempo ordinario (20 de septiembre, 2020): Isaías 55,6-9; Salmo 144:; Filipenses 1,20c-24.27a; Mateo 20,1-16
MISSIO ofrece "Predicando Misión," como una ayuda de homilía, que proporciona conexiones a la misión a partir de las lecturas de los domingos, los Días festivos y los Días Santos.
Diferente es la actitud y la acción de Dios frente a las acciones de los seres humanos.
La liturgia de la palabra de este domingo XXV del tiempo ordinario nos recuerda que diferente son las intenciones y acciones de Dios, a las intenciones y acciones de nosotros, los seres humanos. Desde esta perspectiva el mensaje de la palabra de Dios hoy nos recodara que la salvación que se nos ofrece de parte de Dios no es por méritos propios, sino porque es fruto de la misericordia de Dios.
La primera lectura del libro del profeta Isaías, se ubica en el contexto del destierro a Babilonia. El cual fue la consecuencia para el pueblo de Israel por su desobediencia y distanciamiento de la alianza con Dios.
Isaías centra su predicación profética en la denuncia de esta realidad, Pero, también, fomenta la esperanza centrando esta predicación en el tema de la consolación: Dios no abandona a su pueblo. Si el pueblo es infiel, Dios permanece fiel. El profeta insiste en llamar la atención de todo el pueblo, para que todos busquen al Señor. Haciendo un llamado a la conversión porque Dios es clemente y misericordioso y está dispuesto a darnos el perdón.
Pablo en la segunda lectura, que nos llega de su carta a los Filipenses, escribe desde su cautiverio posiblemente en Éfeso o en Cesárea, para plantearse y plantearnos su propia disyuntiva: Vivir o morir, vivir para seguir la misión encomendada o morir para estar con Cristo. Pablo presiente que su vida está llegando a su fin. El a vivido en su propia persona la pasión del Señor: Perseguido, encarcelado y despreciado. Pero también tiene la fuerte convicción de que no hay muerte sin resurrección. Pablo nos comparte su certeza de la misión cumplida, pero a la vez su preocupación por las comunidades amenazadas por el ambiente y la realidad en que vivían.
En la parábola de los trabajadores descontentos que nos trae el evangelio Mateo. La paga refleja nuevamente que diferente es la actitud y la acción de Dios frente a las acciones de los seres humanos. Mateo escribe especialmente a una comunidad de cristianos de origen judío y no judío. Para muchos de ellos era inaceptables que los recién convertidos y los no judíos tuvieran el mismo trato que los más antiguos o los que eran judíos. Esto creaba conflictos. Mateo presenta a Jesus como el Mesías que proclama la llegada del Reino de Dios, un Reino que llega para todos. Jesus nos presenta nuevamente el inmenso amor del Padre por nosotros.
