Él es el origen, guía y meta del universo
Reflexiones sobre las lecturas del XXI domingo del tiempo ordinario (23 de agosto, 2020): Isaías 22,19-23; Salmo 137; Romanos 11,33-36; Mateo 16,13-20
MISSIO ofrece "Predicando Misión," como una ayuda de homilía, que proporciona conexiones a la misión a partir de las lecturas de los domingos, los Días festivos y los Días Santos.
Jesus es el Mesías, pero no un Mesías triunfalista, sino un Mesías que es servidor. Y quiere que sus discípulos reconozcan en el plan de Dios. Un plan inesperado por el pueblo de Israel.
“y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?”, es la pregunta de Jesus nos hace, a través de las lecturas de este domingo XXI del tiempo ordinario. La liturgia de la palabra nos regala en estas lecturas la oportunidad de reflexionar sobre cuan certeros e imprescindibles son los designios de Dios y que tan caducos y contrarios pueden ser nuestros caminos.
“Aquel día, llamaré a mi siervo” la primera lectura del libro del Profeta Isaías, nos presenta un pasaje bíblico de la época anterior a la primera deportación del pueblo de Israel a Babilonia, hecho ocurrido en el año 597 AC.
Isaías pronuncia un oráculo de condenación a Sobna, el mayordomo de palacio y en el a todo el liderazgo de Israel, quienes reemplazaban al rey en su ausencia y se consideraban dueños perpetuos de un trono que utilizaban con arrogancia para darse los honores y desde el cual cometían abusos y arbitrariedades.
“¡Qué abismo de generosidad, de sabiduría y de conocimiento, el de Dios!” La segunda lectura de la carta a los Romanos. La cual, para muchos biblistas, es la obra que presenta el pensamiento más profundo del apóstol Pablo. Nos presenta a este, haciendo eco de los himnos de sabiduría, para recordarnos la distancia enorme que hay entre los planes egoístas y el profundo designio de Dios.
"Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo." La lectura del evangelio de Mateo. Integra el antiguo y nuevo testamento en perspectiva al plan de Dios, donde Jesus y su misión están en el centro. Dando a la vez sentido de continuidad y plenitud a la historia de salvación.
En este pasaje bíblico, Jesus interroga a sus discípulos, a los mismo que lo han acompañado ya por un buen tiempo. Él quiere saber cuál es la que estos discípulos han escuchado de la muchedumbre, pero quizás más importante, para jesus, que es lo que ellos piensan.
Jesus es el Mesías, pero no un Mesías triunfalista, sino un Mesías que es servidor. Y quiere que sus discípulos reconozcan en el plan de Dios. Un plan inesperado por el pueblo de Israel.
La pregunta de Jesús “y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?”, también va dirigida a nosotros, a la Iglesia de hoy, a nuestra sociedad, a nuestra familia, a cada uno… ¿Quién digo yo que es Jesús?... ¿Quién es Jesús para ti?
