Predicando Mision

Solemnidad de Jesucristo Rey del universo - 25 de noviembre, 2018

Written by Equipo MISSIO | Nov 19, 2018 7:25:44 PM

 

Yo soy el Alfa y la Omega, el que es, el que era y el que viene, el Todopoderoso 

Reflexiones sobre las lecturas de lSolemnidad de Jesucristo Rey del universo (25 de noviembre, 2018): Dn 7,13-14; Salmo 92; Ap 1,5-8; Jn 18,33b-37

MISSIO ofrece "Predicando Misión," como una ayuda de homilía, que proporciona conexiones a la misión a partir de las lecturas de los domingos, los Días festivos y los Días Santos.

Llegamos al final del calendario litúrgico, en específico del Año B. Las lecturas de hoy como las que nos han venido acompañando las últimas semanas, nos hablan en un tono que nos hace pensar y quizás sentir, sobre el final de los tiempos.

Ya hablamos más extensamente anteriormente de este modo de escribir apocalíptico, y solo para recordar su intención particular es llenar de esperanza aun en momentos difíciles.  

Las lecturas de hoy nos presentan textos del profeta Daniel, del libro del apocalipsis y del evangelista Juan; todas ellas nos hablan de la persona Jesus y su mesianismo, así como también, del Reino de Dios que el hizo presente. El antiguo testamento que es prefiguración y a la vez preparación del nuevo testamento presenta a Daniel, quien nos habla de una visión nocturna, donde “el hijo del hombre” se presenta ante un anciano y este le da poder real y dominio eterno, sobre todo. La lectura del apocalipsis en complementariedad con la de Daniel menciona por nombre propio a Jesucristo y establece que su vida, pasión, muerte y resurrección nos ha hecho un pueblo de sacerdotes y nos recuerda que ese mismo Jesucristo que el Alfa y la omega, todopoderoso, volverá y “todo ojo lo vera” 

En el de Juan, se presenta el encuentro entre Jesus y Pilatos, un encuentro tal vez muy conocido para nosotros, donde Jesus menciona que su reino no es de este mundo, que su reino supera esta realidad. Y frente a la pregunta de Pilatos: ¿eres rey? Él le contesta "Tú lo dices: soy rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo; para ser testigo de la verdad. Todo el que es de la verdad escucha mi voz." 

El misterio pascual de Jesus, no es algo del pasado, al igual que la buena nueva del Reino que nos vino a comunicar, esta se renueva cada día, en medio de las realidades en que vivimos Injusticias, indiferencias y crueldades, el Reino de Dios está presente y hace de cada uno nosotros sus discípulos misioneros, un protagonista constructor de este Reino. Retomemos hoy la invitación del Papa Francisco a ¡no quedarnos al margen de la marcha de la esperanza viva! (EG #278) Porque el Reino de Dios ha penetrado en nuestra historia y porque Jesus no ha resucitado en vano. ¡Vallamos entonces, a llevar la alegría del evangelio que da esperanza!