Hemos encontrado al Mesías
Reflexiones sobre las lecturas del Segundo domingo del tiempo ordinario - (17 de enero 2021): 1Sm 3,3b10.19; Salmo 397; 1Cor 6,13c-15a.17-206; Jn 1,35-42
MISSIO ofrece "Predicando Misión," como una ayuda de homilía, que proporciona conexiones a la misión a partir de las lecturas de los domingos, los Días festivos y los Días Santos.
La vida de hoy está llena de luces y ruidos, de luchas y retos. Muchas veces perdemos la capacidad del silencio, en especial del silencio interior, el que nos ayuda a escuchar a Dios...
“Habla, Señor, que tu siervo te escucha." Este domingo, la liturgia nos da la oportunidad de comenzar un nuevo periodo litúrgico que llamamos “tiempo ordinario,” llamado también “el tiempo durante el año” El termino ordinario, nos puede confundir y creer que es cualquier tiempo, pero al decir ordinario en la liturgia nos referimos al tiempo donde se presenta la vida y hechos de Jesus y de la historia de salvación en general. No hay un enfoque específico, como en la cuaresma o la navidad.
Este domingo, dejamos entonces el tiempo de navidad, en el que hemos estado inmersos desde la celebración del nacimiento de Jesus el 25 de diciembre hasta el domingo pasado que celebramos bautismo del Señor. Las lecturas de la liturgia de hoy nos invitaran a reflexionar en el tema de la vocación y el discernimiento. Dos temas importantes para iniciar nuestro caminar por este año calendario.
El primer libro de Samuel y el evangelio de Juan se complementan este día para presentarnos el tema sobre la vocación. El joven Samuel, quien se encuentra en el templo al cual fue consagrado por su madre, escucha una voz y creyendo que es su maestro Eli, se levanta tres veces en la noche para responderle. Samuel no conoce aún a Yahvé, pero sabe ya la virtud de la obediencia y sabe acudir a su llamado. Elí comprendió que era Yahvé quien llamaba al niño y le enseñó entonces a crear la actitud de escucha: “Habla señor, que tu siervo escucha.”
"Venid y lo veréis." Juan es más profundo en este mensaje en su evangelio. Dos Discípulos de Juan el Bautista, escuchan a su maestro expresarse sobre Jesus como “el cordero de Dios” sin más preguntas, siguen a Jesus y disponen a ser sus discípulos. Decisión que traerá cambios a su vida. El dialogo que se entabla entre Jesus y ellos es corto pero lleno de significado: “¿Qué buscan?”, “¿Maestro donde vives?”,” Vengan y lo verán”.
La vida de hoy está llena de luces y ruidos, de luchas y retos. Muchas veces perdemos la capacidad del silencio, en especial del silencio interior, el que nos ayuda a escuchar a Dios a discernir su llamado. Que este segundo domingo del tiempo ordinario sea una oportunidad para escuchar a Dios y discernir el llamado que él nos hace hoy.
¿Nos hemos planteado que, de una manera u otra, nuestra vida tiene por delante un llamado, una vocación, un destino, una tarea, una misión?