Que tus fieles, Señor, proclamen la gloria de tu reinado
Reflexiones sobre las lecturas de San Lucas (18 de octubre, 2019): 2 Tim 4,10-17b; Salmo 144; Lc 10,1-9
MISSIO ofrece "Predicando Misión," como una ayuda de homilía, que proporciona conexiones a la misión a partir de las lecturas de los domingos, los Días festivos y los Días Santos.
“El Señor me ayudó y me dio fuerzas para anunciar íntegro el mensaje, de modo que lo oyeran todos los gentiles.” Declara San Pablo hoy en la segunda carta a Timoteo. Así llegamos a la celebración litúrgica de otro de los evangelistas: San Lucas. Quien, de los cuatro símbolos bíblicos asignados para ellos (el toro, el león, el hombre y el águila,) es representado con el toro; pues comienza su evangelio contándonos la historia de Zacarias, sacerdote, ofreciendo los sacrificios en el templo.
Lucas como ya lo mencionamos fue evangelista, pero no apóstol. Escribió el tercer evangelio y el libro de los hechos de los apóstoles. Fue medico cristiano, de origen griego, idioma que conocía muy bien y en el cual escribió sus obras con la intención de animar a las comunidades cristianas, quienes esperaban la segunda venida de Cristo y por lo tanto empezaban abandonar su celo por el evangelio.
Lucas, presenta la historia de salvación y la acción del Espíritu Santo, como el hacedor, el medio, por el cual se fortalece la relación con Jesucristo. El cual, está en el centro de esta historia de salvación. Es por eso, por lo que en el evangelio de Lucas podemos distinguir claramente la acción de Espíritu Santo (es el evangelio neumatologico por excelencia.) Lucas es también el evangelista que más habla de Maria, de la oración y la misericordia de Dios.
Su evangelio describe a Jesus como Señor y Salvador, quien también presenta el Reino de Dios activo y presente en la vida. De manera particular entre los marginados de ese tiempo: los pobres, los pecadores, las mujeres y los gentiles.
Lucas, quien es también patrono de los médicos y de los artistas, divide sus escritos en tres etapas. La primera, el tiempo de preparación o tiempo de Israel. La segunda, Jesus como centro de la historia de Salvación. Y, la tercera, la iglesia como tiempo misionero, hasta segunda venida de Cristo. Lucas habla de las primeras dos en su evangelio y dedica para la tercera los Hechos de los apóstoles.
Que Junto a Lucas podamos hoy renovar nuestra relación personal y comunitaria con Jesus, que podamos permitir al Espíritu Santo que fortalezca esta relación y que a la vez nos lance a la misión de presentar este evangelio a todos, especialmente a los que se encuentran en las periferias de nuestra existencia.
