Predicando Mision

La transfiguración del Señor - 6 de agosto, 2019

Written by Equipo MISSIO | Jul 30, 2019 6:58:50 PM

 

Oímos esta voz del cielo

Reflexiones sobre las lecturas de la transfiguración del Señor (6 de agosto, 2019): Dn 7,9-10.13-14; Salmo 96; 2Pe 1,16-19; Lucas 9, 28b-36

MISSIO ofrece "Predicando Misión," como una ayuda de homilía, que proporciona conexiones a la misión a partir de las lecturas de los domingos, los Días festivos y los Días Santos.

Celebramos hoy la transfiguración del Señor. El evangelista Lucas nos presenta este hecho, como también lo hacen Mateo y Marcos. Si leemos el contexto en el que Jesus y sus discípulos durante la transfiguración, nos daremos cuenta de que Jesus sube a la montaña a orar, después anunciar de que le espera el rechazo y la muerte; después de decirles a sus seguidores, que el que quiera ser su discípulo debe cargar su cruz, y Lucas a agrega, a diferencia de los otros evangelistas, “cada día.”

Otro elemento importante de recalcar es que Lucas nos deja saber que todo esto sucede mientras Jesus oraba, todo es resultado de la oración. La relación fuerte y obediente de Jesus con el Padre expresada a través de la oración, esta siempre presente en Lucas. Moises y Elias aparece resplandecientes de gloria, resplandecientes de la presencia del amor del Padre y la fuerza del Espíritu Santo para conversar con Jesus a cerca de su pasión, muerte y resurrección en Jerusalén: ¡Qué momento más divino! ¡Que bendición y reto para Pedro, Juan y Santiago: ¡Ser testigos del poder y la gloria de Dios!

“¡Qué bien estamos aquí! Hagamos tres tiendas: Una para ti, otra para Moises y otra para Elias” en la transfiguración, Jesus a permitido a sus discípulos cercanos ver un destello de aquello que ningún ojo vio y ningún oído escucho. Una experiencia que supera la realidad humana, tanto que Pedro al reaccionar frente a la grandeza divina “no sabía lo que decía”

“Escúchenlo” es la clave de todo el relato y de lo que sus discípulos deben hacer, ayer y hoy,  no es armar tiendas, no es querer quedarse, sino escucharlo, seguir su palabra. La transfiguración es un momento especial donde Jesus muestra su gloria y con ella quiere dar esperanza a sus discípulos para que estos recuperen fuerzas y coraje para seguir adelante e ir a donde otros necesitan escuchar la buena nueva que da esperanza.

Hoy somos invitados como discípulos misioneros creados a imagen y semejanza de Dios ha que nos revistamos de su gloria y “transfiguremos” nuestras realidades cotidianas; personales y comunitarias, para que con nuestra presencia; palabras y acciones, seamos canales vivos de la gloria de Dios en esta tierra.