Mirad a mi siervo, a quien prefiero
Reflexiones sobre las lecturas del bautismo del Señor (12 de enero, 2020): Isaís 42,1-4.6-7; Salmo 28; Hechos 10,34-38; Mateo 3,13-17
MISSIO ofrece "Predicando Misión," como una ayuda de homilía, que proporciona conexiones a la misión a partir de las lecturas de los domingos, los Días festivos y los Días Santos.
¡Celebramos hoy el bautismo del Señor! Hoy Jesus con su bautismo quiere recordarnos nuestro propio bautismo con el cual nacemos a la vida de la gracia. Que hoy con esta celebración reflexionémonos en la elección que Dios ha hecho de nosotros y podemos conscientemente renovar nuestras promesas bautismales que un día nuestros padres, padrinos y comunidad nos dieron la oportunidad de unirnos.
La palabra de Dios nos habla de las personas elegidas por Dios para colaborar en la historia de salvación, a estas personas las llama “los siervos del Señor.” La primera lectura nos presenta un cantico del Profeta Isaías, donde enfatiza el proceso de elección y el rol que los siervos del Señor hacen en la comunidad. Nos recuerda que es Dios quien elige, se complace y les da su espíritu a sus siervos, con la finalidad que instruya a su pueblo con tolerancia y suavidad, sin discriminar y juzgar, buscando hacer justicia e implantar el derecho, convirtiéndose así en luz para las naciones.
La segunda lectura de los hechos de los apóstoles nos presenta el discurso de Pedro en casa de Cornelio, uno de los primeros paganos convertidos al cristianismo. Aquí Pedro hace una profesión de la fe en Jesus, recordando los hechos concretos en lo que los seguidores de Jesus creen. O sea, que Pedro declara uno de los primeros credos en la comunidad cristiana. Este segmento junto al resto de versículos que completa es discurso constituyen el corazón del mensaje de la buena nueva anunciada y proclamada por los primeros cristianos.
La lectura del evangelio de Lucas, por supuesto nos presenta el momento del bautismo del Señor. Lucas nos cuenta más detalles sobre el significado del bautismo y la manifestación divina sobre Jesus en este momento. De este pasaje podemos aprender que bautizarse fue una decisión clave para Jesus, por dos razones: La primera no tenía que hacerlo al no tener pecado alguno. Y la segunda porque en el bautismo, Jesus fue ungido por el Espíritu Santo para iniciar su ministerio publico.
¿Qué te llama la atención del bautismo de Jesus?
Que en esta celebración sea renovado también nuestro bautismo y que seamos cada vez más conscientes de la elección que Dios ha hecho de cada uno de nosotros al llamarnos a ser sus discípulos. Misioneros, listos para formar parte de una Iglesia en salida, lista para llevar la alegría del evangelio a las periferias de propia existencia.
