Misión en la Escritura

XXXIII domingo tiempo ordinario - 15 de noviembre, 2020

Written by Equipo MISSIO | Nov 10, 2020 7:59:48 PM

Ustedes son ciudadanos de la luz        

Reflexiones sobre las lecturas del XXXIII domingo tiempo ordinario (15 de noviembre, 2020): Proverbios 31,10-13.19-20.30-31; Salmo 127; 1 Tesalonicenses 5,1-6; Mateo 25,14-30

MISSIO ofrece "Misión en la Escritura" para alimentar un corazón misionero, proporcionando reflexiones sobre los temas misioneros en las lecturas de los domingos, fiestas y días festivos.

¿Qué talentos te ha regalo Dios? ¿En dónde hacen falta tus talentos?  ¿Cómo puedes participar en la construcción del Reino aquí y ahora?  

Este domingo XXXIII del tiempo ordinario el evangelio de Mateo nos presenta la parábola de los talentos. La cual, junto al texto de las jóvenes previsoras, forma parte de las parábolas escatológicas con las que el evangelista nos quiere dejar saber las actitudes que debemos tener frente a la segunda venida de Jesus.  

La parábola de los talentos se centra en cómo actuar con los dones que Dios nos da.  Los dones son la moneda del Reino, ¡Gran riqueza que Dios nos confía verdad!  El don o regalo más grande es el mismo Espíritu Santo, quien nos ayuda en nuestro proceso de conversión y nos mantiene cerca de Jesus como sus discípulos en misión.  

En el bautismo recibimos una gracia especial llamada gracia sacramental. Con ella y con los dones y carismas que el espíritu nos regala a cada uno comenzamos nuestra caminar en la vida. Así empezamos a usar o no estos regalos. Según lo hacemos desarrollamos su máxima capacidad.  Si correspondemos con amor, progresamos en nuestra relación con Jesus y con el prójimo, desarrollando nuestra cercanía con Dios o sea nuestra santidad y por supuesto profundizamos en nuestro discipulado y misión. 

“A todo el que tiene se le dará y tendrá de sobra; pero al que no tiene, se le quitara incluso lo que tiene” Igual pasa con la justicia, la libertad, la paz y la verdad como valores supremos, crecen si los usamos y disminuyen si los ignoramos. La recompensa para quienes trabajan con fidelidad y eficacia en la construcción del Reino de Dios “aquí y ahora” es gozar del banquete del Señor. Este banquete es imagen de la realización plena de este Reino en presencia total con Dios.     

¿Qué talentos te ha regalo Dios? ¿En dónde hacen falta tus talentos?  ¿Cómo puedes participar en la construcción del Reino aquí y ahora?  

Gracias Señor por nuestros talentos. Gracias por ponerlos en nuestra vida. Ayúdanos a descubrirlos y multiplicarlos; y así ponerlos juntos con otros al servicio de la construcción de tu Reino. Nos ofrecemos hoy a ti como tus discípulos misioneros, recíbenos y acompáñanos. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amen