Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo
MISSIO ofrece "Misión en la Escritura" para alimentar un corazón misionero, proporcionando reflexiones sobre los temas misioneros en las lecturas de los domingos, fiestas y días festivos.
“Hágase en mí según tu palabra."
Esas palabras pronunciadas al ángel Gabriel por Maria en el momento de la anunciación, son palabras que describen la personalidad y la fe de una mujer joven en una situación inusual y comprometedora. En efecto, desde ese momento esta mujer en su ser permitió nueva vida, permitió que Jesus se engendrara y con su “si” permitió que Dios se encontrara con el ser humano.
Maria engendro a Jesus, no solo en el vientre, sino en su corazón y como toda madre, lo acompaño durante toda la vida, viéndolo crecer, enseñándole sobre la cultura y fe de su pueblo, pasándole tradiciones y maneras de creer y de vivir. Podemos imaginarnos que Maria, como toda madre, estuvo presente con sus cuidados, con su palabra, pensamiento, oración y amor en la vida de su hijo.
Ella pudo estar al pie de la cruz (Juan 19, 25,) diciendo “si” y nuevamente con su presencia pudo convertirse otra vez en madre, en vez madre de la Iglesia naciente de esa cruz al recibir y ser recibida por discípulo amado. Maria con su presencia y sus “sis” se convierte en la figura de mujer que nos acompaña como madre, esposa, hermana y amiga, como acompaño a Jesus en toda su vida y a los apóstoles, en especial en el cenáculo en espera de la llegada del Espíritu Santo. Maria la mujer del “si” no invita hoy en la celebración de la solemnidad de la anunciación a encontrar y renovar nuestro discipulado diciendo “si” al llamado que Dios nos hace a la misión. Pidamos a Maria, que ella nos acompañe en esta jornada de fe y haga fecunda nuestra respuesta.