Una época extraordinaria del año

¿Puedes nombrar las cinco estaciones litúrgicas de la iglesia?

¿Qué temporada se asocia con el color verde?

La Temporada Litúrgica Católica, que comienza en enero después del final de la Temporada de Navidad, se conoce como Tiempo Ordinario. Pero no dejes que la palabra "ordinario" te engañe. Ordinario aquí significa ordenado (ordinal) o numerado, como en el segundo domingo del tiempo ordinario, el tercer domingo, etc. No tiene nada que ver con ser aburrido o común. Esta temporada del año es en realidad un momento "extraordinario" para vivir el mandato del Evangelio para la misión. Es un momento para ser creativos en nuestro celo misionero imitando las acciones del amor de Cristo. Es una temporada de esperanza y rejuvenecimiento, un momento para cuidar el medio ambiente y una oportunidad para hacer que nuestros esfuerzos misioneros sean más llamativos que nunca. 

El Tiempo Ordinario se divide en dos partes: la primera viene después de Navidad y dura hasta el Miércoles de Ceniza, y la segunda viene después de la Temporada de Pascua y continúa hasta que comienza el Adviento al final del año calendario. Estos dos períodos forman una temporada litúrgica cuando la Iglesia se centra en la vida y el ministerio de Cristo. Basada en las lecturas del Evangelio dominical, la temporada recoge temas de los evangelistas que se centran en la vida redentora de Nuestro Salvador y los misterios en ella. 

El Tiempo Ordinario en 2019 usa el ciclo C de las lecturas del domingo. Los Evangelios del domingo en el ciclo de este año se toman casi exclusivamente del evangelista y médico a quien llamamos San Lucas. Sus escritos hacen un esfuerzo especial para mostrarnos el amor de Cristo por los pobres (Lc 4:18, 6:20), un amor que se ha llamado preferencial a los necesitados, pero sin excluir a los que no son pobres. Por supuesto, el Señor nos ordena que amemos a todas las personas y no solo a los pobres; sin embargo, a lo largo de la Biblia, uno puede detectar un lugar especial en el corazón de Dios para aquellos que están desamparados, heridos o vulnerables. Es en este espíritu de amor desinteresado y divino para aquellos que son abatidos que Lucas nos instruye a que realicemos actos de caridad en el nombre de Jesús para producir buenos frutos en Su nombre.

San Lucas destaca modelos tan grandes para imitar como el buen samaritano que amaba a su vecino, una desafortunada víctima de la violencia que fue robada, golpeada y dejada morir en el camino (Lc 10: 25-37). Más tarde, él sabiamente aconseja a los seguidores que acumulen tesoros no en la Tierra sino en el cielo, donde permanecen inagotables (Lc 12: 32-48). Este amor cristiano por los demás es el espíritu del Tiempo Ordinario, y nos pide que imitemos a Cristo con nuestras acciones guiadas por el corazón por los pobres. Siempre debemos preguntarnos qué hemos hecho para ayudar a los necesitados entre nosotros.

El color litúrgico usado en la Iglesia durante el Tiempo Ordinario es verde, que es el color de la esperanza y de la vida. El verde nos recuerda que la vida cotidiana siempre está despertando, siempre creciendo y en movimiento. Esta es una postura completamente esperanzadora que mira hacia nuestra futura unión con Dios. El verde también nos recuerda que estamos conectados a la Tierra y a toda la creación. Como administradores de lo que Dios ha hecho, debemos esforzarnos por cuidar nuestro medio ambiente y ayudar a la naturaleza a florecer. Este sería un gran momento para explorar lo que la ciencia enseña sobre cómo hacer que nuestros recursos naturales sean más sostenibles. Asegúrese de que sus acciones diarias sean consistentes con el mandato cristiano de ser administradores del medio ambiente. Hacer esto más concreto en su vida podría incluir encontrar formas de reducir, reutilizar y reciclar siempre que sea posible.

Hacia el final del Tiempo Ordinario, en el mes de octubre, tendremos la oportunidad de ser excepcionales en nuestro tiempo ordenado. El Papa Francisco ha declarado que el mes de octubre de 2019 será un mes misionero extraordinario. Coincidiendo con el Sínodo de los Obispos que tendrá lugar en Brasil y se centrará en la Amazonía, octubre será un momento para reflexionar sobre la importancia de la justicia ambiental como parte del mandato misionero cristiano. En los Estados Unidos, las Obras Misioneras Pontificias (MISSIO) recordarán grandes ejemplos como la Hermana Dorothy Stang, SND, quien fue martirizada el 12 de febrero de 2005 por sus acciones para ayudar a los pobres y al medio ambiente en la Amazonia brasileña. Su ministerio nos recuerda que el amor por los pobres y el cuidado de la creación es parte integral de vivir nuestra fe. (Más sobre el Mes Misionero Extraordinario para ayudarlo a enfocar sus trabajos personales y corporales de misericordia y justicia ecológica pronto llegará.)

¡Así que recuerde que el Tiempo Ordinario es una temporada para ser extraordinario! Estas son las semanas numeradas del calendario católico que están lejos de ser aburridas, sin amor o desapasionadas. Centrado en Jesucristo y su amor por todos, ¿cómo podrían ser cualquier cosa menos excepcional? Que tu vida diaria se llene con el ejemplo amoroso de Jesucristo, quien salva y se acerca a todos los que son pobres. 

MISSIO ofrece pruebas temáticas en MissioBot para examinar su conocimiento religioso, y este blog del Padre Leo Pérez, OMI, para reflexionar sobre cuestiones de misión y fe.